domingo, 28 de octubre de 2012

II Quedada organizada por el Club MTB Cardeña

 


Crónica II Quedada


Agradecimiento:
Muchos son los agradecimientos que desde el club se tienen que hacer por la colaboración recibida. Además de agradecer enormemente los medios y la predisposición mostrada en todo momento por el Ayuntamiento de Cardeña, agradecer también la ayuda proporcionada por la Diputación de Córdoba y el Parque Natural Sierra de Cardeña y Montoro.
Igualmente hay que agradecer a todos los patrocinadores la confianza que ponen en este grupo de amantes al ciclismo. Gracias entre otras cosas a su patrocinio, es posible organizar en el pueblo eventos que fomentan el deporte y que animan la vida de Cardeña, de sus habitantes y de foráneos que se animan a participar en ellos. 
Desde el club también se quiere dar las gracias a todos aquellos voluntarios que desinteresadamente han aportado su granito de arena y nos han brindado su estimable ayuda para la realización de esta marcha. 
Por último pero por ello no menos importante y para terminar el capítulo de agradecimientos, hay que hacer una mención especial a las familias de todos los componentes que formamos el club ¡Gracias por aguantarnos¡


Crónica:
Domingo 28 de Octubre de 2012, amanece y el otoño nos regala un fabuloso aunque frío día de esta melancólica estación del año. Es época de monterías y de búsqueda de setas pero hoy además de esas lúdicas actividades, por fin ha llegado la fecha señalada en la que toma forma toda la ilusión, empeño y esfuerzo puesto por el club MTB Cardeña, con su junta directiva a la cabeza, para llevar a cabo su 2ª Quedada de Mountain Bike, con la que el pueblo de Cardeña abre sus puertas y acoge con los brazos abiertos, a visitantes aficionados al ciclismo que se han animado a participar en esta marcha y conocer así, algunos de los más bellos rincones que esconde este maravilloso enclave de la sierra cordobesa.

La mañana arranca en el recinto ferial. Es el lugar de encuentro donde hoy nos hemos dado cita. La alegría reina entre todos los integrantes del club que tras empezar con los preparativos poco a poco comenzamos a ver la llegada de ciclistas y coches cargados de bicicletas. Con la afluencia de participantes el ambiente comienza animarse. Me parece mentira y algo impensable hace unos años, ver lo que estoy viendo. Nada más y nada menos que 256 ciclistas reunidos en nuestro pueblo el segundo año en el que se organiza la quedada. Como buen amante al ciclismo y a nuestro pueblo, es algo que me llena enormemente y que intentaré recordar toda la vida. 

Tras la entrega de dorsales y tras facilitar algunos consejos e indicaciones al personal, va llegando la hora de montar en las bicicletas y emprender la marcha. Los nervios hace un rato que empezaron a florecer y no desaparecerán ya, hasta que pasados unos minutos de las 9:00 h. con el sonido de la bocina, que tengo el honor de hacer sonar, se da la salida. 
Con el inicio de la marcha y tras cruzar por la plaza, el hasta ahora reagrupado pelotón ciclista se dirige al camino del cordel de Fuencaliente a Marmolejo ó más conocido como el camino de Los Malagones ó del Castillo. Allí se cambian los adoquines de las calles del pueblo por la tierra del camino que tanto nos gusta. 
El recorrido ha sido pensado para circular lo menos posible por carretera y reducir así al máximo el riesgo del tráfico de coches.
A los pocos kilómetros del inicio de la marcha, el recorrido gira a la izquierda tomando el camino de la Atalaya. Este tramo que termina en la carretera de Azuel a Conquista consta de bastantes trampas, ya que aparte de bancos de arena también tiene regajos que obligan a extremar la seguridad y a sacar toda la técnica y habilidad de las que disponen los ciclistas para no irse al suelo. En este tramo también se encuentra el divertido paso del arroyo del Endrinal, que debido a las últimas lluvias lleva ya agua corriendo.
En esta primera parte del recorrido se produjo el incidente más desafortunado de la mañana, ya que uno de los participantes sufrió una caída que le ocasionó una importante herida en una de sus rodillas, teniendo que ser evacuado en ambulancia al hospital más cercano.

Poco a poco se va llegando al cercano pueblo de Azuel, que por su situación se conforma como un verdadero balcón de Andalucía y de lo que presumen orgullosos nuestros queridos vecinos. Tras el paso por esta localidad el recorrido cruza la carretera N-420 por debajo del puente próximo al cementerio, para continuar por La Colada de Azuel a La Aldea del Cerezo y llegar a las inmediaciones del Cerro de la Colmena, superando antes una dura y empedrada subida que empieza a mermar las fuerzas de los participantes menos preparados y que ocasiona numerosas roturas de cadena. Tras esta subida y cruzar la pista del Tres se encuentra el avituallamiento que ayuda a recuperar fuerzas y a darse un respiro. Continuando hacia el camino de Madereros vamos acercándonos por un tramo relativamente fácil a La Aldea del Cerezo.

En este punto se separan los integrantes de la ruta corta de 42 km que comienzan el regreso de 8 km a Cardeña, con los valientes de la ruta larga que tras bajar a La Vegueta del Fresno y completar otros 10 km más, cubrirán un total aproximado de 52 km.

En la aldea del Cerezo, pequeña pedanía de Cardeña y que tiene su origen en el pastoreo, se inicia uno de los tramos más bellos pero a la vez más duros de todo el recorrido. La vertiginosa bajada por La Vegueta hasta el río Yeguas es un auténtico regalo para la vista y se puede considerar como la guinda del pastel. 
Estamos en tierras de lobos y de linces y aquí se han rodado bonitas y espectaculares escenas de la película Entrelobos del director cordobés Gerardo Olivares. 
Sauces, Fresnos y Álamos son algunas de las especies forestales que a lo largo de toda la ribera del río contemplan el discurrir de las aguas del Yeguas. Bajar hasta allí no es posible habitualmente pero finalmente se ha conseguido el permiso necesario para poder hacerlo. Una vez llegados al río y tras dar una pequeña vuelta circular por esta finca pública de la Administración, hay que cubrir un pequeño tramo por un cortafuegos, donde lo más sensato es bajarse de la bicicleta y hacerlo andando debido a la pendiente y a la gran cantidad de tierra. Salvado el obstáculo del cortafuegos, donde se produjeron varias caídas sin consecuencias, llega el momento más exigente de la jornada. La ascensión de vuelta hasta El Cerezo consta de 3 durísimos kilómetros con rampas con fuertes desniveles y mucha piedra suelta que la hacen ser aún más dura y difícil. Durante esta subida y en la parte derecha, el Cerro del Colchón y el arroyo de Las Cantareras son testigos del esfuerzo con el que los participantes salvan las empinadas rampas. Este es un buen lugar donde los escaladores pueden lucirse y de hecho así se demostró. Los primeros participantes subieron como flechas mostrando una forma física envidiable. 

De nuevo en El Cerezo, es momento de enfilar ya los últimos kilómetros que llevan de regreso a Cardeña. Este tramo es bastante engañoso porque aunque puede parecer llano no deja de picar hacia arriba, sobre todo, con la última subida del Matadero. Poco a poco lo vamos completando y aprovecho estos últimos kilómetros para intercambiar impresiones con compañeros llegados de otros puntos de la provincia. Me resulta grato escuchar que el recorrido ha gustado, a lo que yo agradecido y entre bromas y risas respondo ¡lo mejor aún no ha comenzado¡ ¡ya veréis cuando lleguemos y empecemos a comer lechón, carne de monte y a beber cerveza¡. Estos típicos platos de la gastronomía del pueblo conforman el menú con el que recuperaremos fuerzas una vez sea completado el recorrido. Como siempre cuando está finalizando una ruta, acordarse tambien de una cerveza bien fresquita hace que sean más llevaderos los últimos kilómetros y se puedan hacer de una manera más alegre.

Llegados al recinto ferial aparcamos nuestras bicicletas. Ahora ha llegado el momento de recobrar la energía gastada, de conversar y de compartir opiniones y anécdotas surgidas durante la marcha. 

Al finalizar la comida que degustamos en el interior de la caseta municipal, preparada para tal ocasión y tras las palabras de felicitación de las autoridades que se dieron cita para estar presentes en un día tan señalado, se comenzó con la entrega de premios y el sorteo de numerosos regalos.

Tras los placenteros momentos disfrutados durante el transcurso de la comida, el intenso y apasionado día que hemos vivido va llegando a su fin, no sin antes endulzarnos la sobremesa, dando cuenta de unos deliciosos dulces caseros y unas sorprendentes tartas adornadas con fotografías tomadas en los momentos previos a la salida de la quedada.

Personalmente, este día ha cumplido sobradamente con las expectativas y me ha llenado de alegría y emoción. Los gratos momentos vividos y compartidos con todos los amigos y compañeros del club y algunas de las imágenes que han quedado grabadas en mi retina a lo largo del día, espero poder recordarlas siempre. Para ayudar a que eso sea posible, aquí queda ya esta humilde y modesta crónica que espero haya sido del agrado de todas aquellas personas que se hayan animado a leerla.

Hasta la próxima aventura. ¡Que bien me lo paso en Cardeña¡ ¡Naturalmente¡